Cuando hablamos de visión, una de las cosas que he descubierto es que, cuando hay visión siempre hay provisión y eso no solo se aplica en la iglesia sino también en todas las áreas de la vida, porque donde Dios pone una visión Él da su provisión.
Hay muchas personas que deben arreglar situaciones personales y familiares, entonces dicen: “luego lo hago” y no debería ser así, porque nadie sabe si hay mañana, por ende, no hay que vivir pensando que vamos a morir algún día sino como que si cada día es el último de su vida. Por lo tanto, lo que no hemos hecho en toda la vida debemos hacerlo hoy.
Hay cuatro provisiones para llevar a cabo una visión.
Leamos Génesis 1:26-31:
26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.

27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.

28 Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer.

30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así.

31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.”

De acuerdo con este pasaje lo primero que debemos entender es que somos criaturas hechas a imagen y semejanza de Dios. Además, en esta cita encontramos cuatro provisiones para la vida y para que todo lo que emprendamos nos vaya bien; estas son: Potencial, recursos, ambiente y la cuarta es la sumatoria de las tres anteriores.
Hay gente que vive con la queja por delante y si es así no va a tener éxito en la vida, pues su enfoque debe ser ver que su potencial tiene que ser desarrollarlo. Debemos de dejar de mirar el potencial de otros porque cada uno tiene algo propio ¡Dios nos creó a todos para ser personas de éxito!
La Palabra nos enseña en Juan, que había una multitud escuchando a Jesús y cuando terminó les dijo a sus discípulos que le diera de comer y ellos respondieron “Maestro no tenemos para alimentar a tantas personas”, pero Jesús sabe que es hijo de Dios y está tranquilo. Luego aparece un niño con 5 panes y 2 peces y el Maestro conociendo quien era su Padre y su potencial bendijo sus recursos.
El problema es que estamos mirando lo que Dios le ha dado a otros y no lo que nos ha dado a nosotros y cuando Dios nos da el potencial nos da los recursos.
Con Ezequiel 28:1-26 aprendemos que podemos estar en el ambiente correcto, con el potencial y los recursos, pero hacer las cosas incorrectas. En medio de las dificultades debemos aprender a salir adelante porque mayor es quien está en nosotros que el que está en el mundo.
En Eclesiastés 9:11 nuevamente la palabra de Dios nos enseña que todos tenemos oportunidades.
“Me volví y vi debajo del sol, que ni es de los ligeros la carrera, ni la guerra de los fuertes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas, ni de los elocuentes el favor; sino que tiempo y ocasión acontecen a todos.”
Cuando estás en el ambiente correcto te juntas con la gente correcta, porque si te la pasas con mata gigante terminas siendo un mata gigante.
Hoy en el ambiente propicio, declaro que descubres tu potencial y lo desarrollas, viene sobre tu vida los recursos que necesitas para desarrollar la visión que Dios te da.
En este día especial, declaremos que vamos a mirar el potencial, los recursos, el ambiente y las oportunidades que Papá nos ofrece y dejar de quejarnos por lo que no tenemos.