Sí, la soledad es un espíritu que afecta también a los hijos de Dios, todos en algún momento hemos vivido un episodio de soledad. Hay personas que lidian con esto constantemente, otros disfrutan de la soledad. Mi pregunta es: ¿Usted se ha sentido solo? ¿Pasa por continuos momentos de soledad?
Hermano, la soledad no proviene de Dios, la soledad es: Carencia voluntaria e involuntaria de compañía, es un pesar y una melancolía que se siente por la ausencia, en resumen, la soledad no es buena, las personas comienzan a encerrarse en sus problemas y se alejan de todos. La soledad solo puede aceptarse cuando lo hacemos para buscar de Dios en intimidad o cuando necesitamos estar solo para tomar decisiones importantes, pero siempre y cuando sea buscando la voluntad del Señor.
Si usted es de las personas que vive episodios de soledad eventual o constantemente, necesita acabar y romper con ese espíritu, ¿cómo lo hace?: ¡Hágase parte de gente que le ayude a la salida del problema!
La causa de la soledad, siempre proviene de una puerta abierta que se le dejó al enemigo, la falta de perdón, el recordar el pasado, esto último siempre lo usa satanás para envolverte con el espíritu de soledad. No permita que le haga dudar de su Creador y que le robe su fe, por tanto, debemos estar atentos e identificar que puerta se le está abriendo al enemigo.
Hay tres tipos de soledad:
- Soledad física, es aquella que se origina por desintegración familiar, por la muerte de un ser querido, por el distanciamiento.
- Soledad emocional, esta es la que surge cuando hay carencias en el corazón a causa de falta de afecto, de paternidad, lo que hace que las personas sean inseguras. En este tipo de soledad, se puede estar en compañía, pero aun así se sentirá solo o sola.
- Soledad espiritual, es cuando usted se aleja de la presencia de Dios y comienza a cuestionar su voluntad. No experimenta ningún encuentro con Él.
¿Cómo vencer el espíritu de soledad?
- Deje que Jesús gobierne y sea el centro de su vida. Que Él dirija sus emociones, pensamientos y acciones.
- Olvídese del pasado. Viva el presente y el futuro glorioso del Señor. Recuerde que en Cristo Jesús todas las cosas son hechas nuevas.
- Tenga la convicción firme que Jesús venció el espíritu de soledad en la cruz
La persona que camina en fe, sabe que no se sentirá afligido, solo, ni angustiado, porque sabrá que Dios estará con Él dondequiera que vaya.