Una gran manifestación de regocijo fue lo que se evidenció en los servicios por parte de los creyentes del Ministerio Internacional Jesús es El Rey, tras volver a escuchar la palabra de Dios dentro del templo.
Tras casi un año sin poder estar reunidos como lo demanda las Escrituras en el Salmos 133:1 “¡Mirad cuán bueno es habitar los hermanos juntos en armonía!”, debido a la cuarentena por el Covid-19, los miembros de la congregación agradecieron a Dios por haber sido guardado durante este tiempo difícil.
Cabe descartar que en virtud de continuar bendiciendo al pueblo de Dios con las enseñanzas bíblicas, previamente el Apóstol Felix Orquera junto al equipo ministerial, acondicionó el lugar para recibir a los creyentes. Asimismo se delimitó el aforo a los servicios permitiendo el ingreso de 50 personas; incluyendo a los servidores, y previniendo el acceso de niños y adultos mayores, es por ello que se programó tres servicios dominicales y varios semanales.
Además, siguiendo las instrucciones del Gobierno nacional y los organismos de Salud, los espacios y el inmobiliario de la iglesia son sinitizados en su totalidad antes y después de los servicios, adicionalmente las sillas fueron colocadas con varios metros de separación, se habilitó un área de entrada y salida debidamente acordonada y demarcada para evitar el contacto de persona a persona. Vale resaltar que un equipo de discípulos preparado para tomar la temperatura estuvo dispuesto a las afueras de la congregación, el cual adicionalmente verificó el uso correcto de la mascarilla y aplicó alcohol gel a cada creyente antes de entrar al templo. Otras de las medidas sanitarias y de higiene que se concretó fue el ingreso a los sanitarios permitiendo su uso de una sola persona. Desde el punto de vista informativo de forma continua fue transmitido un vídeo sobre las reglas que se deben seguir dentro del lugar, en virtud de seguir cuidándonos todos.
Agradecidos por volver a ser ministrados por la palabra de Dios, los asistentes levantaron un clamor al cielo pidiendo por los enfermos para que sean sanados, por los funcionarios que están en eminencia para que obtengan sabiduría y las decisiones que tomen sean de bendición a las naciones y asintieron la importancia de seguir congregandose juntos.
Vale destacar que durante el tiempo de cuarenta y en obediencia a las normativas establecidas por el Gobierno, los servicios fueron transmitidos a través de las plataformas digitales; no obstante, para los creyentes ha sido un proceso fuerte ya que muchos necesitan una palabra directa que le afirme su fe en Dios o bien una oración por una necesidad apremiante, pues muchos de ellos, espiritualmente hablando, todavía requieren de cobertura directa y personal de quienes ya tienen mayor experiencia.
