Cuando decimos que Dios tiene un plan con nuestra vida, es como decir Dios tiene una visión con nuestra vida. Dios siempre ha tenido un plan con la creación, podríamos decir que Dios gesta un plan desde la Eternidad, Él tuvo un sueño con la creación y en ese sueño aparecemos tú y yo.
Génesis 1:1-3 TLA
“Cuando Dios comenzó a crear el cielo y la tierra, la tierra no tenía forma, ni había en ella nada que tuviera vida. Las aguas estaban cubiertas por una gran oscuridad, pero sobre la superficie del agua se movía el espíritu de Dios. El primer día de la creación dijo entonces Dios: «¡Quiero que haya luz!» ¡Y al instante hubo luz!”
Como lo vemos en la Escritura, Dios se mueve sobre lo que no tiene forma, pero en su interior Él imagina las formas que esta creación puede tomar, notemos que la Palabra señala “Dios dijo” cuando señala esto, va seguido de un acontecimiento, lo mismo pasa cuando Dios gesta un plan, Dios lo dice y Dios lo hace.
Génesis 1:26-28 TLA
“Al ver Dios tal belleza, dijo: «Hagamos ahora al ser humano tal y como somos nosotros. Que domine a los peces del mar y a las aves del cielo, a todos los animales de la tierra, y a todos los reptiles e insectos». Fue así como Dios creó al ser humano tal y como es Dios. Lo creó a su semejanza. Creó al hombre y a la mujer, y les dio esta bendición: «Quiero que se reproduzcan, quiero que se multipliquen, quiero que llenen la tierra y la pongan bajo su dominio. Que dominen a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los seres vivos que se arrastran por el suelo».”
Todo lo que Dios ha dicho fue hecho, y todo lo que Dios ha dicho en tu vida, será hecho, porque la visión de Dios siempre será mayor y prevalecerá, ante todo.
No solo Dios nos da una visión, nos da un propósito y también herramientas para poder caminar en el, las herramientas de Dios nos permiten cumplir sus sueños en nuestras vidas.
Dios se entristece al ver lo que pasa con Su creación, no es un tema que pase por alto y cuando Dios ve que su creación se aparta del sueño que gestó en la Eternidad, Dios se entristece.
Cuando Dios quiere hacer algo siempre busca a alguien, veamos la escritura, Genesis 6:9-14:
“Noé siempre obedeció a Dios. Entre la gente de su tiempo no había nadie más bueno ni honrado que él. 10Noé tuvo tres hijos, que fueron Sem, Cam y Jafet. Dios se dio cuenta de que los habitantes de la tierra eran rebeldes y violentos. Por eso le dijo a Noé: «Voy a acabar con todos los seres vivientes de este mundo, y dejaré la tierra inhabitable porque está llena de violencia. Así que toma madera y hazte una casa flotante. Úntala con brea por dentro y por fuera, y constrúyele varios cuartos.”
Al ver la maldad en la tierra, Dios busca a alguien que tenga ciertas características, Dios vio el corazón de Noé, incluso, hizo un trato con él, cuando Noé se involucra y ejecuta los planes de Dios, se involucra con la visión de Dios y esta visión trae bendición que alcanza a las generaciones postreras.
Dios le entrega la visión y las herramientas a Noé, obedeciendo todas las instrucciones de Noé entiende que no se trata de los planes que él pudo tener, sino de los planes que Dios le confío, esto respaldó a Noé puesto que obedeció totalmente a Dios.
Dios tiene una visión con esta casa, depositó una visión para salvar almas, expandir el amor de Dios, no se trata de una visión personal sino de lo que Dios quiere hacer en esta ciudad, si la visión es el sueño de Dios, la visión para esta casa es:
Evangelizar
Afirmar
Discipular
Enviar
Esto está sujeto a la Palabra de Dios, tal como lo dice Mateo 28:19:
“Ustedes vayan y hagan más discípulos míos en todos los países de la tierra. Bauticenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.”
Esta es la visión de Dios, no es el sueño de un hombre, está en el corazón de Dios que miles de personas conozcan de Jesús.
Herramientas que mueven nuestra visión:
– Las Casas de Paz, es donde Dios nos sorprende con milagros.
– Las escuelas: Nuevo Creyente, Discípulo y Líder de Casa de Paz son escuelas que nos hacen uno con el mover de Dios
Los servicios, las escuelas bíblicas, el instituto de Liderazgo, estas y otras herramientas nos dejan movernos en la visión del Padre.
El Padre depósito, dones y talentos para que los dispongamos en la obra y casa de Dios. Debemos ser parte de su visión, involucrarnos, creer en el sueño de Dios, apoyando en las casas de paz, sirviendo, pero por sobre todo anunciando el evangelio de Jesucristo, moviéndose en el sueño de Dios.